Después de una operación de pecho, ya sea de aumento como de reducción, es esencial usar un
sostén preoperatorio.
Un sujetador que
aporte más soporte que una prenda interior clásica, para así asegurar el
soporte firme del pecho.
Durante el periodo que sigue a la operación. Esa zona del cuerpo, queda
particularmente sensible, por lo que merece toda la atención posible.
Características para una mayor sujeción
Un buen sostén post quirúrgico es aquel que
desempeñe la función médica y a la vez haga sentirse cómoda.
Por encima de todo, debe proporcionar un
apoyo firme y eficaz, pero garantizando siempre
suavidad al pecho.
El
soporte debe ser perfecto, sin comprensión excesiva. Los
senos deben estar apoyados y mantenidos exactamente en su lugar.
Es esencial que las
costuras sean lo más planas posible para evitar la irritación y sobre todo, que
nunca se coloquen a nivel de las cicatrices.
Por supuesto, debe
evitarse los refuerzos.
Un sujetador de comprensión de calidad debe
proporcionar un efecto de segunda piel para así poder usarlo regularmente.
La
apertura y el cierre deben ser muy fáciles por lo que si tiene el cierre en la
parte delantera mejorará el movimiento para el personal médico y para la rutina diaria para extraerlo y ponerlo.
Dado que estos sostenes se llevarán durante todo el día y la noche, debe proporcionar una
sensación general de comodidad.
El periodo posterior a la cirugía estética siempre es muy restrictivo y es por ello que cada sujetador de Promise, ha sido objeto de estas reflexiones.
¿Por qué es esencial usar un sujetador de apoyo?
Es esencial que el
pecho esté perfectamente ajustado para que
no se mueva en absoluto.
El mantenimiento no solo ayuda a contener el dolor, sino que también
promueve la curación al mantener el pecho en su lugar.
Si el
sujetador se mueve, no solo puede herirnos, sino que sobre todo, los tejidos no
podrán reabsorber adecuadamente y la cicatrización tardará más tiempo.
También mantiene los
implantes en su lugar, incluso cuando se realizan movimientos durante el día.
Un buen ajuste,
limita la aparición de edemas e hinchazones.
En conclusión, un
buen sujetador, mejora el resultado final, reduce el dolor, acelera la curación y permite una mayor libertad de movimiento.
¿Cuánto tiempo hay que usar este tipo de sujetadores?
Siempre será
dependiendo del prospecto médico, aunque se suele utilizar entre 4 y 8 semanas.
Con el
permiso médico, se podrá usar
sostenes regulares como parte de las actividades estándar después de pasar ese tiempo.
¿Cómo debe ser un sujetador de calidad?
El soporte ha de ser
firme, efectivo y ajustable.
Los
tirantes deben ser ajustables, para mantener el
pecho recto a una altura natural.
El
cierre a poder ser, debe ser
delantero para un mejor movimiento.
Las
costuras deben ser planas o con ausencia de ellas para una mayor seguridad y comodidad.
¿Existen varios modelos de sujetadores?
Debido a las
limitaciones médicas, los sujetadores para la cirugía de pecho son muy limitados, y suelen ser los
sujetadores deportivos los que
mejor se adaptan a las características esenciales para este tipo de operaciones.
¿Qué material se debe utilizar para este tipo de sujetadores?
Los materiales deben ser
antimicrobianos y transpirables, que se sequen rápidamente para dejar escapar la transpiración y favorezcan la curación.
Las
fibras elásticas y de lycra son las preferidas por sus cualidades de elasticidad y resistencia.